Entiendo. Pero a su vez, ¿no tiene algo de mal gusto?, ¿algo de morbo? No puedo definir por qué ni cómo, pero a mi me corre como un escalofrío. Quizás sea patológico.
Supongo que es una de esas imágenes que preferimos no ver por la calle, pero que si nos dicen que existe damos toda una vuelta a la manzana para observar el espectáculo.
Disculpen que me meta, y disculpen si de momento ignoro al caballero gitano de la camilla (un asilo para minusválidos llamado Sampedro, muy gracioso). Ocurre que cada tanto me doy una vuelta por este blog, y no he podido dejar de notar dos cosas. La primera son los valientes y continuados esfuerzos que realizan tanto la dueña de casa como sus comentaristas por intelectualizar todo. Todo. Todo. Pero lo que más llama la atención es el grado de agresividad (intelectual) en los comentarios. Es como el equivalente bloggero e intelectual de una lucha femenina en el barrro. No digo que me desagrade, todo lo contrario, pero de inmediato surge la sospecha: "Hm, atrás de esta violencia seguro que hay algo...". Algo intelectual, obvio.
Le doy la derecha al caballero en su apreciación. Me voy a tomar el atrevimiento de retocar su metáfora.Yo diría que es el equivalente a una lucha femenina en dulce de leche para diabéticos (lamento si molesto la idiosincracia "no popular" de este chiquero de cerdos importados, la elección del dulce fue en pos de mantener el tono cromático -una deferencia para con Elso ) Esta claro , no? empalagosa, azucarada, artificial, correcta y lo peor, permitida. Vamos! "esta bueno que tenga ese medio", " me corre un escalofrío" ( ruego al lector que lea el entrecomiollado con voz de niña de escuela, porque lo estoy ridiculizando). El tema no es la intelectualización, sino su complemento, un tono excesivamente cuidado, "muy politicamente correcto" hasta en sus deslices. A eso se suma que la gran mayoría de los cerdos concurrentes a mi gusto sufre de síndrome de Nuremberg, ninguno quiere ser fascista. Le propongo a Pimienta que realice el Decálogo del buen no Fascista , así podemos sin psiquiatras solucionar la patología y escribir tranquilos.
Tengo una mejor idea: ¿por qué no nos juntamos a ver Freaks de Tod Browning comiendo un postrecito Ser de dulce de leche? Yo pongo las cucharitas descartables, tengo muchas. Aunque en realidad sería mejor ver alguna película de Almodóvar, especialista en tratar temas políticamente incorrectos con un lenguaje bello (Freaks es de una perversión demasiado natural). Sí, el manchego ensuciaría menos este lodazal light.
8 comentarios:
Un peligro para él y los demás, pero por otro lado está bueno que tenga ese medio y esa libertad para circular....
Entiendo. Pero a su vez, ¿no tiene algo de mal gusto?, ¿algo de morbo? No puedo definir por qué ni cómo, pero a mi me corre como un escalofrío. Quizás sea patológico.
Supongo que es una de esas imágenes que preferimos no ver por la calle, pero que si nos dicen que existe damos toda una vuelta a la manzana para observar el espectáculo.
Disculpen que me meta, y disculpen si de momento ignoro al caballero gitano de la camilla (un asilo para minusválidos llamado Sampedro, muy gracioso).
Ocurre que cada tanto me doy una vuelta por este blog, y no he podido dejar de notar dos cosas. La primera son los valientes y continuados esfuerzos que realizan tanto la dueña de casa como sus comentaristas por intelectualizar todo. Todo. Todo.
Pero lo que más llama la atención es el grado de agresividad (intelectual) en los comentarios. Es como el equivalente bloggero e intelectual de una lucha femenina en el barrro. No digo que me desagrade, todo lo contrario, pero de inmediato surge la sospecha: "Hm, atrás de esta violencia seguro que hay algo...". Algo intelectual, obvio.
Es como decía algún filósofo: la cultura es una forma de sublimar el espíritu.
A eso mismo me refería.
Le doy la derecha al caballero en su apreciación. Me voy a tomar el atrevimiento de retocar su metáfora.Yo diría que es el equivalente a una lucha femenina en dulce de leche para diabéticos (lamento si molesto la idiosincracia "no popular" de este chiquero de cerdos importados, la elección del dulce fue en pos de mantener el tono cromático -una deferencia para con Elso ) Esta claro , no? empalagosa, azucarada, artificial, correcta y lo peor, permitida. Vamos! "esta bueno que tenga ese medio", " me corre un escalofrío" ( ruego al lector que lea el entrecomiollado con voz de niña de escuela, porque lo estoy ridiculizando). El tema no es la intelectualización, sino su complemento, un tono excesivamente cuidado, "muy politicamente correcto" hasta en sus deslices. A eso se suma que la gran mayoría de los cerdos concurrentes a mi gusto sufre de síndrome de Nuremberg, ninguno quiere ser fascista. Le propongo a Pimienta que realice el Decálogo del buen no Fascista , así podemos sin psiquiatras solucionar la patología y escribir tranquilos.
Tengo una mejor idea: ¿por qué no nos juntamos a ver Freaks de Tod Browning comiendo un postrecito Ser de dulce de leche? Yo pongo las cucharitas descartables, tengo muchas. Aunque en realidad sería mejor ver alguna película de Almodóvar, especialista en tratar temas políticamente incorrectos con un lenguaje bello (Freaks es de una perversión demasiado natural). Sí, el manchego ensuciaría menos este lodazal light.
Publicar un comentario